viernes, 5 de febrero de 2010

El embargo de viviendas se multiplica por cuatro pese a las refinanciaciones

Fuente: Expansion.com

La crisis económica ha abierto un profundo agujero en el bolsillo de las familias y, ante la imposibilidad de hacer frente a los pagos, el número de ejecuciones hipotecarias se ha disparado en los últimos meses.

Desde que irrumpió la crisis, a mediados de 2007, se han registrado en España 140.000 procesos judiciales que, generalmente, culminan con el embargo del inmueble. Y, según las previsiones del Consejo General del Poder Judicial, las ejecuciones seguirán subiendo en 2010 hasta alcanzar los 180.000 inmuebles.

Las estadísticas de esta institución muestran que, en 2006, antes de que los primeros signos de deterioro económico aflorasen en los mercados, el total de ejecuciones se situó en 17.635.

Esta cifra, que recoge todos los embargos realizados durante el ejercicio completo, fue superado con creces durante todos los trimestres, desde septiembre de 2008 (ver cuadro).

El vertiginoso repunte de las tasas de paro es el principal motor de las ejecuciones hipotecarias y desde el sector bancario asumen que, mientras se siga destruyendo empleo, los impagos crecerán.

Sube la morosidad
En noviembre la ratio de mora del sector (bancos, cajas y cooperativas de crédito) se situó en 4,94%, según el Banco de España. Y, para 2010, los expertos del sector auguran unas tasas de entre el 7% y el 9%.

Las entidades financieras subrayan que su intención no es quedarse con la vivienda de ningún cliente y que, por tanto, siempre se buscan acciones encaminadas a negociar con el deudor una salida airosa. "Estudiamos el caso y vemos qué posibilidades hay para que el cliente supere el bache. Si es posible, alargamos el plazo de la hipoteca u ofrecemos al cliente que contacte con entidades que refinancian hipotecas. Cuando no hay alternativa, aconsejamos la venta del piso para, de este modo, evitar las cargas de un procedimiento hipotecario", explica el responsable de uno de los principales bancos españoles.

Otras entidades reconocen que cada vez es más habitual la inclusión de periodos de carencia de entre uno o dos años en los que el cliente deja de pagar el principal del préstamo e, incluso, los intereses. "Ejecutar es siempre la última alternativa. Perjudica al banco y al ciudadano", señalan.

La mayor propensión a renegociar préstamos queda reflejada en el fuerte incremento de las novaciones hipotecarias (cambios en las condiciones de las escrituras). Según el Instituto Nacional de Estadística, en noviembre el número total de hipotecas con cambios en sus condiciones fue de 40.156, lo que representa un crecimiento interanual del 35,3%. De éstas, más del 80% de las novaciones (32.379) se realizaron dentro de la misma entidad. Por otro lado, un estudio publicado recientemente por la Agencia Negociadora de Productos Bancarios revela que hasta un 37% de las personas con hipoteca se vio forzado a retrasar el pago de su cuota por lo menos una vez durante el año pasado.

En cualquier caso, cuando renegociar las condiciones no bastan para que el ciudadano afronte el pago y la opción de la venta del inmueble tampoco es plausible, llega lo inevitable: la entidad financiera inicia el proceso de ejecución hipotecaria, cuyo procedimiento puede tardar entre 8 y 18 meses, en función de la zona geográfica.

Cifras preocupantes
- En el segundo trimestre de 2009 se batió récord de ejecuciones hipotecarias: 23.704. La cifra supera con creces los 17.635 embargos realizados durante todo 2006

- La mitad de las hipotecas de vivienda que se constituyeron en noviembre fueron renegociaciones de préstamos. Aun así, la banca no puede frenar la mora.

- Las previsiones apuntan a que en 2010 se registrarán 180.000 nuevas ejecuciones y que la tasa de morosidad del sector bancario oscilará entre el 7%y el 9%.

Protocolo de reclamaciones
Las entidades cuentan con un protocolo de reclamaciones de la deuda que se activa cuando el deudor tiene una cuota impagada de más de 15 días y termina cuando éste lleva entre 90 y 120 días sin hacer frente a sus compromisos financieros.

"Tenemos un procedimiento mecanizado que genera automáticamente cartas, llamadas, mails, sms y otras acciones encaminadas a reclamar la deuda impagada. Por otro lado, directores de oficinas y territoriales, entre otros, gestionan la situación en función de los plazos y los importes", explican fuentes de un banco. En función de cada situación, se decide si se renegocia el préstamo o se traslada a la asesoría jurídica para su reclamación judicial.

La industria azulejera pierde un 29% de sus ventas en 2009

Fuente: Expansion.com

El sector azulejero español, hasta hace poco el segundo fabricante mundial sólo por detrás de China, ha vivido un auténtico ‘annus horribilis’ en 2009. Los fabricantes de baldosas han reducido su volumen de negocio un 29% en 2009, según los datos provisionales hechos públicos por la patronal sectorial Ascer. En total sus ventas el año pasado se situaron en 2.600 millones de euros.

A la ya esperada caída del mercado nacional por la situación de la construcción de vivienda –se cifra en el 36%-, se ha sumado un fuerte desplome del negocio internacional, una de las tradicionales fortalezas de las empresas españolas, con un retroceso de una cuarta parte en el último año, hasta 1.660 millones de euros.

La complicada situación de la demanda no sólo en España, sino también en los grandes mercados tradicionales como Estados Unidos y Europa, además de otros por los que las azulejeras apostaron con fuerza como Rusia, se ha sumado la falta de crédito. Ascer considera que las entidades financieras “no han analizado las verdaderas posibilidades del sector”.

En el último año se han producido importantes recortes de plantilla y de producción en el sector, que se concentra en más de un 90% en la provincia de Castellón. Durante 2009 se ha producido una larga lista de suspensiones de pagos, como las de Azuvi y Cerámicas Gaya, e incluso la desaparición de firmas históricas como Italcerámica. El sector mantenía a 207 empresas a cierre del año, frente a las 240 estimadas hace un par de años.

Nou Temple ofrece una quita del 50% a sus acreedores

Fuente: Expansion.com


La inmobiliaria valenciana Nou Temple, que se encuentra en concurso desde 2008, ha presentado su propuesta de convenio en el juzgado. La empresa ofrece a sus acreedores el pago del 50% de su pasivo durante un plazo de ocho años, con dos de carencia.

Según el informe concursal, las tres sociedades del grupo Nou Temple en concurso cuentan con un pasivo de 151 millones de euros. Los principales acreedores son Caixa Catalunya, Caja Castilla-La Mancha y CAM.

Ahora los acreedores tienen de plazo hasta el 4 de marzo para sumarse al convenio mediante adhesión notarial y el 9 de marzo está prevista la junta de acreedores que debe decidir si ratifica el convenio y la continuidad de la empresa. El grupo valenciano fue uno de los grandes exponentes del fuerte crecimiento inmobiliario en la última década. En el momento del concurso contaba con el desarrollo de 1.500 viviendas en la Comunidad Valenciana, Cataluña y Baleare

Una filial de la constructora Bruesa solicita el concurso voluntario de acreedores

Fuente: Extension.com

ruesa Gibraltar, filial del grupo guipuzcoano Bruesa Construcción, ha solicitado ante los juzgados de lo Mercantil de Madrid, donde tiene su sede, la apertura del concurso de acreedores dado su estado de insolvencia actual.

El despacho de abogados IURE, que representa a varios acreedores de la constructora, asegura en un comunicado que pocos días antes de solicitar el concurso de acreedores Bruesa Consrucción Gibraltar modificó su razón social pasando a llamarse Gibralcon 2004.

Gibralcon 2004 ha enviado una carta a sus acreedores en la que explica que se encuentra en estado de insolvencia actual, aunque la califica de provisional.

Según IURE, la compañía explica en la misiva que su insolvencia es consecuencia de "la ilegal resolución unilateral" de un contrato por parte de las sociedades Mónaco Ocean Village, Ocean Village Properties, y Ocean Village Marinas, que le habrían dejado a deber más de 22 millones de libras (alrededor de 25,5 millones de euros).

La solicitud de concurso, con fecha 25 de enero, ha recaído en el Juzgado de lo Mercantil número 5 de Madrid.